En plena era de los escritorios llenos de ventanas y los exploradores de archivos con miles de iconos, un proyecto de código abierto está demostrando que la consola sigue muy viva. Se llama Superfile y es un gestor de archivos para la terminal con una propuesta clara: ofrecer una experiencia moderna, visual y productiva sin renunciar a la ligereza de la línea de comandos.
A diferencia de los clásicos gestores en modo texto, Superfile apuesta por una interfaz más “bonita” y cuidada, con elementos que recuerdan a algunas aplicaciones gráficas, pero funcionando íntegramente dentro de la terminal. El objetivo es que tanto administradores de sistemas como usuarios avanzados puedan moverse por el sistema de archivos, copiar, mover o borrar ficheros y lanzar comandos habituales sin salir del teclado.
Instalación sencilla en Linux, macOS y Windows
El proyecto, alojado en GitHub, ofrece instaladores muy directos para los principales sistemas operativos. En Linux y macOS basta con ejecutar un script de instalación desde la web oficial, mientras que en Windows se puede instalar con PowerShell o a través de gestores de paquetes como Winget o Scoop.
Para quienes prefieren compilar desde cero, Superfile está escrito en Go, por lo que basta con clonar el repositorio y lanzar el script de build para generar el binario spf y añadirlo al PATH del sistema. Una vez instalado, el gestor se inicia simplemente escribiendo spf en la terminal.
Aunque el soporte para Linux y macOS es completo, los propios desarrolladores avisan de que en Windows todavía hay funciones que no están totalmente soportadas, algo habitual en proyectos multiplataforma que priorizan primero los entornos Unix.
Un gestor de archivos pensado para crecer
Más allá de mostrar directorios y permitir operaciones básicas, Superfile quiere convertirse en una especie de “centro de control” dentro de la terminal. Desde su documentación se insiste en que soporta plugins, temas y configuración avanzada de atajos de teclado.
Los plugins permiten añadir funciones adicionales sin tocar el núcleo del programa, mientras que los temas cambian la apariencia para adaptarse a gustos oscuros, claros o a esquemas de color concretos. Los atajos de teclado son personalizables, y se recomienda especialmente a los usuarios de Vim o Neovim que cambien la configuración por defecto para aprovechar una experiencia más familiar.
Otro detalle interesante es que Superfile incluye un sistema de autocomprobación de actualizaciones: el propio programa revisa de forma periódica si hay una nueva versión en GitHub y avisa al usuario si existe una actualización disponible. Esta función puede desactivarse desde el archivo de configuración para quienes prefieran controlar las versiones manualmente.
Pensado para administración, pero también para usuarios curiosos
Aunque Superfile encaja muy bien en el día a día de administradores de sistemas, DevOps o desarrolladores que viven en la terminal, también puede resultar atractivo para usuarios intermedios que quieran ir un paso más allá del explorador de archivos gráfico tradicional.
Su enfoque de “productividad primero” facilita navegar por grandes árboles de directorios, revisar estructuras de proyectos, gestionar archivos en servidores remotos o trabajar dentro de contenedores y máquinas virtuales donde la consola suele ser la única opción.
El proyecto es de código abierto, está bajo licencia MIT y acepta contribuciones. Sus responsables animan tanto a enviar parches como a colaborar en documentación, traducciones o simple reporte de errores. Incluso invitan a que nuevos desarrolladores se sumen como mantenedores del núcleo.
Un ejemplo más de cómo la terminal sigue evolucionando
Superfile es un ejemplo más de esa nueva ola de herramientas de consola que intentan combinar la potencia tradicional de la terminal con interfaces más amables y funcionalidades modernas. Lejos de ser una reliquia del pasado, la consola se está convirtiendo en un entorno cada vez más sofisticado, donde proyectos como este compiten por hacer la vida más fácil a quienes prefieren escribir comandos antes que hacer clic.