En un mundo donde los datos son un recurso vital, la supercomputación emerge como un pilar fundamental en la revolución digital. Aunque los términos «supercomputación» o «computación de alto rendimiento (HPC)» pueden parecer abstractos para muchos, su impacto es palpable en numerosos aspectos de nuestra vida cotidiana y en los avances científicos que modelan nuestro futuro.
¿Qué es la Supercomputación?
La supercomputación se refiere a la capacidad de procesar datos y realizar cálculos complejos a velocidades que superan en gran medida las de las computadoras convencionales. Las supercomputadoras son sistemas informáticos de alto rendimiento que pueden realizar miles de millones, incluso billones, de operaciones por segundo. Estas poderosas máquinas son esenciales para resolver problemas complejos en campos como la física, la meteorología, la genómica, la simulación de materiales, y la inteligencia artificial (IA), entre otros.
La Relación entre Supercomputación e Inteligencia Artificial
La supercomputación y la IA están íntimamente relacionadas. La IA, y más específicamente el aprendizaje automático, depende de cálculos complejos y el procesamiento de grandes cantidades de datos para entrenar y optimizar sus algoritmos. La velocidad de procesamiento y la capacidad para manejar grandes volúmenes de datos hacen de la supercomputación una herramienta esencial para la investigación y el desarrollo en IA.
Velocidad y Capacidad de las Supercomputadoras
Las supercomputadoras tienen una capacidad de procesamiento medida en FLOPS (operaciones de punto flotante por segundo). Esta capacidad puede variar de gigaflops (miles de millones de operaciones por segundo) a petaflops (miles de billones de operaciones por segundo). La supercomputadora más rápida del mundo en 2023, la Fugaku en Japón, puede realizar más de 442 petaflops, es decir, 442 billones de operaciones de punto flotante por segundo.
Distribución y Uso de las Supercomputadoras
El desarrollo y la utilización de supercomputadoras se concentran en los países con mayor desarrollo tecnológico. Estados Unidos, China y Japón son los líderes en este campo, seguidos de Alemania y Francia. Estas máquinas se utilizan en una amplia gama de aplicaciones, desde la predicción de terremotos y tsunamis, la investigación médica y la biología, hasta la astronomía, la economía y las ciencias sociales.
Supercomputación en los Negocios
Aunque la supercomputación es reconocida principalmente por sus aplicaciones científicas, su potencial para los negocios es enorme. Las supercomputadoras pueden acelerar y optimizar los procesos empresariales, como el análisis de datos de mercado, la gestión de la cadena de suministro, el diseño de productos y la planificación financiera. La integración de la supercomputación con tecnologías de aprendizaje automático e IA puede aumentar la eficiencia, reducir costos y mejorar la rentabilidad en los negocios.
La supercomputación está en el corazón de numerosos avances científicos y tecnológicos que definirán nuestro futuro. Desde impulsar la investigación en IA hasta ayudar a las empresas a tomar decisiones basadas en datos, la supercomputación está remodelando el mundo tal como lo conocemos. Con su capacidad para procesar y analizar grandes cantidades de datos a velocidades asombrosas, la supercomputación seguirá siendo un instrumento invaluable en nuestra sociedad cada vez más impulsada por los datos.
¿Cuáles son los mayores supercomputadores hoy?
A partir de 2023, según el ránking que mantiene actualizado TOP500.org, una organización que rastrea y enumera las 500 supercomputadoras más potentes del mundo, estas son las 10 supercomputadoras más grandes:
- Fugaku – Situada en el Centro RIKEN de Ciencia Computacional en Japón, Fugaku es la supercomputadora más rápida del mundo, capaz de realizar 442,0 petaflops (billones de operaciones de coma flotante por segundo).
- Summit – Localizada en el Oak Ridge National Laboratory de Estados Unidos, Summit puede alcanzar 148,8 petaflops.
- Sierra – Esta supercomputadora, ubicada en el Lawrence Livermore National Laboratory de Estados Unidos, puede realizar 94,6 petaflops.
- Selene – Propiedad de la NVIDIA Corporation, Selene está ubicada en Estados Unidos y puede alcanzar 63,3 petaflops.
- Perlmutter – Situada en el Lawrence Berkeley National Laboratory de Estados Unidos, Perlmutter puede realizar 55,0 petaflops.
- TaihuLight – Esta supercomputadora está ubicada en el National Supercomputing Center en Wuxi, China, y puede realizar 93,0 petaflops.
- HPC 5 – Propiedad de Eni S.p.A., una empresa energética italiana, HPC 5 puede alcanzar 52,0 petaflops.
- Marconi-E3 – Esta supercomputadora, ubicada en CINECA en Italia, puede realizar 50,0 petaflops.
- JUWELS Booster Module – Situada en el Forschungszentrum Jülich en Alemania, esta supercomputadora puede alcanzar 44,1 petaflops.
- SuperMUC-NG – Ubicada en el Centro de Supercomputación Leibniz en Alemania, SuperMUC-NG puede realizar 26,9 petaflops.
Estos sistemas de supercomputación se utilizan para una amplia gama de tareas computacionalmente intensivas en campos como la simulación climática, la investigación médica y farmacéutica, la inteligencia artificial, la física de partículas y la astronomía, entre otros.