El 16 de julio de 1993 marcó un hito en la historia del software libre con el nacimiento de Slackware, la distribución de Linux más veterana que aún sigue en pie después de tres décadas. Conmemorando su trigésimo aniversario, Slackware se destaca como un ícono de la evolución tecnológica y una referencia para los apasionados del software libre.
Un vistazo al pasado
En los inicios del mundo del código abierto, Patrick Volkerding, creador de Slackware, tuvo la visión y determinación de ofrecer una distribución de Linux estable y confiable. Tras meses de intenso trabajo y pruebas beta, el 16 de julio de 1993, Volkerding anunció oficialmente Slackware como una distribución lista para su uso. Desde entonces, la distribución ha experimentado un viaje asombroso y se ha convertido en una de las opciones más respetadas en el mundo del software libre.
Una distribución vanguardista
Aunque en la actualidad Slackware no goza de la misma popularidad que otras distribuciones más recientes, su legado es innegable. Conocida por su enfoque minimalista y su énfasis en la simplicidad, Slackware se ha ganado el respeto y admiración de muchos usuarios y expertos en el ámbito tecnológico.
El «celacanto» del software
En un mundo en constante cambio, Slackware es comparable al celacanto, una especie de pez considerada un fósil viviente. Aunque su uso es minoritario en comparación con otras distribuciones más modernas, como Ubuntu o Fedora, Slackware ha resistido la prueba del tiempo y continúa siendo utilizado y apreciado por aquellos que valoran su estabilidad y simplicidad.
Mirando hacia el futuro
Patrick Volkerding y el equipo de Slackware siguen comprometidos con el desarrollo y mejora de la distribución. Aunque enfrentan algunos obstáculos en su camino hacia una versión beta 15.1, están seguros de superarlos y seguir adelante con la evolución de esta icónica distribución de Linux.
Un agradecimiento especial
En este trigésimo aniversario, Patrick Volkerding desea agradecer a todos aquellos que han contribuido y apoyado a Slackware a lo largo de los años. Sin la colaboración y el respaldo de la comunidad, esta historia de éxito no hubiera sido posible.
El legado continúa
Slackware es más que una simple distribución de Linux; es un símbolo de perseverancia y pasión por el software libre. Su historia de 30 años ha dejado una huella indeleble en la comunidad tecnológica y continuará inspirando a futuras generaciones de entusiastas de Linux.
¡Felicitaciones, Slackware! Que sigas iluminando el camino hacia la libertad y el conocimiento para muchos años más.