En el ámbito de la salud pediátrica, la inteligencia artificial (IA) se está consolidando como una herramienta esencial para enfrentar algunos de los desafíos más complejos, particularmente en el tratamiento de enfermedades raras. En el Great Ormond Street Hospital (GOSH), los profesionales se enfrentan a diario con la complicada tarea de atender a niños que sufren condiciones poco comunes. La enorme cantidad de datos, desde historiales médicos hasta informes diagnósticos, puede ser abrumadora, haciendo difícil obtener información relevante de manera rápida y eficiente.
La integración de la IA y el aprendizaje automático en el sistema de salud pediátrica promete transformar el procesamiento y uso de estos datos. En GOSH, están aprovechando los modelos de lenguaje de gran tamaño (LLMs) para manejar la complejidad de la información y mejorar los resultados de los pacientes. Esta iniciativa busca no solo optimizar la atención médica, sino también hacer que el cuidado sea más accesible para los niños con enfermedades raras.
La unidad DRIVE (Data, Research, Innovation, and Virtual Environment), inaugurada en 2018, fue creada con la misión de utilizar datos y tecnología para mejorar los resultados de los niños, sus familias y el personal médico. GOSH aspira a ser un centro global de innovación pediátrica, empleando IA para lograr avances en tratamiento, diagnóstico y atención.
Un cambio significativo ha sido la transformación en la gestión de datos del hospital. Hasta 2019, GOSH operaba con más de 400 sistemas diferentes para la recopilación de datos de pacientes. Reconociendo la ineficiencia de este enfoque, decidieron migrar a una plataforma unificada, EPIC, que integra toda la información del paciente en un único sistema de registros médicos electrónicos. Esta modernización no solo ha facilitado el acceso a los datos, sino que ha optimizado las operaciones del hospital.
A medida que GOSH avanza en su camino hacia la innovación impulsada por la IA, se vislumbra un futuro prometedor para la pediatría y el tratamiento de enfermedades raras, en el que la tecnología desempeñará un papel central en la mejora de la atención médica.
