Las noticias falsas (fake news) y los bulos se propagan por Internet para desinformar, engañar e incluso manipular a los usuarios. En muchas ocasiones, los internautas no son capaces de identificar este tipo de información y, sin quererlo, contribuyen a su difusión. Identificar noticias falsas, entender la tipología y consecuencias de las fake news y conocer cómo reportar y denunciar este tipo de contenidos es crucial en la era digital actual.
Seguramente alguna vez hayas recibido una noticia o mensaje que te haya causado desconfianza. Tal vez pensaste que no podía ser real o que era imposible que algo así hubiese ocurrido. Es posible también que hayas creído fielmente en una información vista en Internet para luego descubrir que era falsa. Este fenómeno ocurre con las fake news o noticias falsas, que se propagan rápidamente por Internet, redes sociales o mensajería instantánea. El objetivo de estas noticias es desinformar, engañar o manipular a los usuarios. Pueden también buscar desprestigiar o enaltecer a determinadas personas o instituciones, obteniendo un beneficio económico. A menudo, estas noticias no son completamente falsas; pueden estar manipuladas o presentar elementos verdaderos de manera engañosa. En el caso de los vídeos, la situación se agrava con los llamados deepfakes, creados para engañar a los espectadores, haciendo que piensen que una persona hizo declaraciones o acciones que en realidad nunca ocurrieron.
La propagación de fake news tiene serias consecuencias: fomentan la desinformación, pueden llevar a la infección por malware o robo de credenciales, incitan a los usuarios a hacer clic en enlaces maliciosos o a descargar archivos que infectan sus dispositivos. También pueden poner en riesgo la salud de las personas al difundir información falsa sobre enfermedades y tratamientos, o dañar la reputación de empresas, personas o instituciones con información falsa.
¿Cómo podemos reconocer una información verdadera de una falsa? Es crucial verificar siempre la fuente de información; consultar múltiples fuentes confiables; analizar las URL de procedencia; leer la noticia completa y no solo el titular; prestar atención al formato y buscar información sobre las personas mencionadas. Herramientas de verificación también pueden ser de gran ayuda. Además, aplicar siempre el sentido común y ser críticos al evaluar la veracidad de las noticias es fundamental. Ante un posible deepfake, debemos fijarnos en si el audio concuerda con la imagen, si los títulos son muy alarmantes o si hay rasgos faciales desajustados.
Denunciar o reportar un contenido falso debe hacerse de manera responsable y utilizando evidencias. Esta campaña de concienciación sobre bulos y noticias falsas orienta sobre cómo hacerlo correctamente.
¿Alguna vez has recibido información y has dudado de su veracidad? ¿Has reenviado algún contenido sabiendo que era un bulo? Comparte tus experiencias con el hashtag #DesmontandoBulos y mantente al día con las publicaciones de la OSI en materia de ciberseguridad para disfrutar de las ventajas de la tecnología sin caer en la desinformación.
