IBM ha dado un paso significativo en su estrategia de ciberseguridad con la adquisición de Randori, una empresa especializada en gestión de superficies de ataque y simulaciones de ataques automatizados. Este movimiento fortalece la oferta de Managed Security Services (MSS) de la multinacional, proporcionando a las empresas herramientas avanzadas para la detección y prevención de amenazas en tiempo real.
Un informe reciente del Área Tech M&A de Baker Tilly destaca la importancia de estas adquisiciones estratégicas, señalando que las grandes corporaciones tecnológicas, incluido IBM, han utilizado este tipo de operaciones para consolidar su liderazgo en el sector. Según el análisis, la incorporación de Randori busca mejorar la capacidad de respuesta de IBM ante un panorama de amenazas cada vez más sofisticado y en constante evolución.
La creciente complejidad de los ataques cibernéticos y la falta de profesionales especializados han llevado a más empresas a recurrir a servicios de seguridad gestionados. Esto ha generado una demanda en aumento de soluciones externalizadas que integren inteligencia artificial y automatización en la defensa digital, promoviendo una protección proactiva y continua.
La industria de la ciberseguridad está en pleno auge, con un notable aumento en las inversiones y las fusiones y adquisiciones. Baker Tilly resalta que el sector ha observado un incremento en la cantidad de actores clave que buscan consolidarse y ofrecer soluciones más robustas. Esta dinámica surge ante la necesidad de proteger entornos digitales en crecimiento, como la nube y el Internet de las Cosas (IoT), impulsando a las empresas a mejorar su capacidad de respuesta frente a riesgos emergentes. Las estrategias adoptadas por grandes empresas como IBM reflejan una clara tendencia hacia la innovación y consolidación en un mercado en constante transformación.
